Mezcla de sensaciones. Eso trajo el final del partido. Alivio por el empate logrado, pensando en un primer tiempo muy malo, donde pudimos irnos perdiendo por más de un gol, como sucedió. Bronca por dos puntos perdido por el repunte del segundo tiempo, el empate temprano y la sensación que lo podíamos ganar en cualquier momento, pese al tiro en el palo que nos pegaron a poco del final.
El primer tiempo pareció de los tiempos pre-Vélez. Dominio muy cansino del balón, que posibilitó el continuo anticipo del rival, el medio de la cancha perdido, con lo cual las llegadas al arco rival fueron casi nulas y el sufrimiento en el propio fue mucho. El Pato atajó un penal (¿la mano de Buonanotte era taaaan dificil de ver, señor arbitro?), y sacó dos pelotas tremendas, pero le vuelven a meter un gol de tiro libre, que fue la exacta fotocopia del que el mismo Gallardo le metió en La Bombonera en el Clausura de este año. Sentido Ibarra, perdido Monzón, muy permeables Paletta-Cáceres, Sebastián sin hacer pie en el medio, Rosada muy solo en la contención, Román absorvido por la marca escalonada, solo el despliegue del Pocho por todos lados que no pudo romper el aislamiento de Martín y Gaitán adelante. Un primer tiempo para el pronto olvido y para no repetir más. La sacamos barata con el 0-1.
Todo cambió en el complemento. Adentro el chileno por el Negro. A los tres minutos ellos con diez. A los diez nosotros con diez (¿la agresión de Ortega también fue taaan difícil de ver?, señor arbitro, que ve sin embargo sobredimensionada la reacción de Cáceres. Era amarilla para los dos). Entró en ritmo Boca. Gaitán preocupó y mucho. Román comenzó a escapar a la marca. El medio fue zona de dominio. Y comenzamos a llegar y a exigir al arquero rival, hasta que una penetración en diagonal de Gaitán de derecha hacia el medio, pase al área a Román, taco hacia atrás al gran goleador que entraba y el Eterno Titán, con tres dedos de zurda (homenaje al Chelo con pierna cambiada) la pone al lado del palo, inatajable. Empate y cuando parecía con la entrada del Pochi por el Pocho, que lo inclinábamos para nuestro lado, nos faltó contundencia, pese al absoluto dominio del terreno. Buenas atajadas del arquero, errores en la definición nos privaron de dos puntos fundamentales. Nos pudimos quedar sin nada, cuando tras error garrafal de Monzón (¿su peor partido en primera?), Abelairas entra solo y la estrella contra el palo de un Pato vencido que solo atinaba a mirar.
Sensaciones encontradas entonces. Muy mal primer tiempo, notable mejoría en el segundo. Seguimos recibiendo goles, aunque la mejora del Pato ya se nota y mucho. Se pudo ganar, se pudo perder. Un punto por bando que no conformó a ninguno fue el resultado final.
P.D.: Dos triunfos en el 2008. Dos empates en el 2009….Olé olé, olé olé olé olá y las gallinas no nos ganan nunca más…..
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