¿Soplo el Pampero o fue el ojo de la tormenta?

El Pampero es un viento conocido en toda la llanura pampeana, que sopla del oeste, es fresco y seco y limpia el cielo tormentoso y lluvioso.
Se denomina "ojo de tormenta" a la parte central de un centro de baja presión, que al pasar por un lugar, detiene el mal tiempo reinante, el cual regresa luego del paso de dicho "ojo".
¿Que habremos visto hoy en La Bombonera? El Pampero que disipe la tormenta de la semana que paso, o una simple pausa en el mal tiempo?. Lo sabremos en diez días luego de enfrentar a Colon y San Lorenzo, los dos punteros actuales del torneo.
Por de pronto, vimos una sólida actuación de Boca, que después de mucho tiempo goleo y termino un partido sin sufrimiento. Fue 3-0, y tuvo sobre todo la virtud del oportunismo y la efectividad que tanto nos estaba haciendo falta.
Boca golpeo de arranque con Román que convirtió el claro penal que el arquero le cometió al Burrito, previa asistencia del propio Román, de gran actuación en todo el partido. A partir de la ventaja, se abrieron los espacios en la medida que los mendocinos tuvieron que adelantarse. Ellos manejaron bien el balón pero, salvo un lapso de un cuarto les costo mucho llegar a plantear peligro. En esos momentos fue decisivo Orión. En los últimos minutos de la primer mitad volvió a presionar arriba Boca y desperdicio varias situaciones para aumentar. Los fantasmas de los últimos partidos volvían a sobrevolar.
Pero tuvieron vuelo corto, ni bien iniciado el segundo tiempo, un contragolpe perfecto determino el segundo de Gigliotti. A partir de entonces el visitante fue por inercia y el tercer gol se veía venir vía contragolpe. Se lo perdió Gigliotti, servido por Román, hasta que el propio Puma lo consiguió mediante la ejecución de un penal, del que fue víctima Colazo en otra contra. En esa jugada fue expulsado el arquero mendocino por doble amonestación.
Volvió a ganar Boca, fue practico y efectivo. Gana una semana de tranquilidad y en este fútbol imprevisible, estar a 6 puntos con 21 en juego no da para el descarte prematuro. Descarte que nosotros mismos dimos por hecho hace solo 4 días. Para que esto no sea mas que un sueño afiebrado habrá que tener una regularidad extraviada hace un par de años. Pero, mientras haya vida, nos aferraremos a cualquier esperanza. A ver si los jugadores, tocados por todo lo dicho y comentado nos sorprenden gratamente
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