7/7/22

Mi opinión (esa, la que a nadie le interesa)

 Battaglia ya es historia. Literalmente, porque es quien como jugador suma más títulos en nuestra historia, a los que agregó 2 más como técnico. Y, eufemísticamente, ya es historia porque fue intespestivamente echado como técnico del equipo.

Cuando en la conferencia de prensa post eliminación hizo notar con fuerza la falta de refuerzos, se olfateaba que algo sucedería. Pero eso por si solo no puede ser tan determinante. Tampoco es motivo suficiente la forma de realizar los cambios (o no hacerlo) durante este último partido, cosa que él mismo se  autocriticó. Evidentemente esto viene de hace rato. A Sebastián lo fueron manteniendo los títulos ganados y algunos triunfos puntuales. La Copa Argentina ganada a fin del año pasado "obligó" a que le firmaran contrato por un año. El triunfo en el clásico le dió aire cuando arreciaban las críticas. Ganar la Copa de la Liga evitó que esto pasara hace un par de meses. Si no, no se entiende que la misma dirigencia (lease Román) que mantuvo a Russo luego de perder con Santos en forma catastrófica, ahora eche un dt por perder por penales una serie que mereció ganar en tiempo normal. No se puede suscribir ni el fondo, ni mucho menos las formas.

Y como a rey muerto, rey puesto, unánimente los medios citan a Ricardo Garecca como el apuntado.

Nadie de +50 años puede olvidar la actitud del susodicho en el peor momento de la historia del club, cosa que para mi, invalida desde lo sentimental todos los muchos méritos profesionales que ha acumulado. Nunca pensé que él o Ruggieri pudieran ser siquiera mencionados para ocupar algún cargo en el club. 

Dicho esto, y si sucediera (hasta último momento rogaré porque no sea), como el escudo está por sobre todo, como no hay nada más lindo que ver ganar a Bocar y festejar títulos y como el único "ismo" al que suscribo es el "boquismo", a partir del momento que firme, desearé, como con todos los dt, que sea el más exitoso de nuestra historia y que se maree de tanto dar vueltas olímpicas. 

Por lo menos, así lo veo yo (Nimo, in memorian).

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