Varias certezas

 Pasó con empate en cero gol el clásico con Racing Club. Se puede decir que desde el rendimiento (lejos aún del óptimo) ha sido una prueba aprobada con un 5. En un partido chato en general, el rival, que si ganaba se prendía en el lote puntero y que venía de meter 6 goles en tres partidos no generó una sola situación de gol. Si alguien quiere ver el vaso medio vacío puede pensar que fueron exageradamente conservadores y vinieron a no perder. Prefiero verlo medio lleno y pensar que algo tuvo que ver el rendimiento Xeneize en la llamativa ineficacia ofensiva del rival.

Hay una idea y poco a poco se van encontrando los intérpretes. Battaglia quiere un equipo intenso para recuperar la pelota lo más lejos posible del arco propio y veloz en el retroceso cuando esto no sucede. Esa parte del juego, ayer se aprobó con creces. También quiere un equipo desplegado en ataque con laterales que suban y con juego interno a dos toques. Eso se logró por momentos, pero siempre faltó la puntada final. Y eso que se dispuso de por lo menos 4 situaciones claras para marcar. Un cabezazo de Izquierdoz en el primer tiempo (lo único rescatable ofensivamente de los 2 en la primer etapa) que contuvo Arias a puro reflejo. Dos mano a mano de Vazquez que también resolvió el arquero, y cuando en un cabezazo del jóven centrodelantero no tenía chances, un defensor la sacó en la línea. No se gana con merecimientos, pero si debía haber un ganador, Boca fue el que hizo los méritos.

Esa idea antes citada de Battaglia ya tiene varios nombres propios para desarrollarla. Rossi da seguridad sobre todo como ayer en las salidas siendo que Racing solo llegó con centros o algún tiro de larga distancia. Izquierdoz-Rojo son una muralla defensiva. Marcos demuestra partido a partido su nivel internacional y Cali su demostrada eficacia. Sandez de gran partido se ha ganado la titularidad. Firme en retroceso y en defensa, ataca mucho y suple con enjundia algunas carencias en el juego ofensivo, ayer fue una de las figuras. En el medio Ramírez-Molinas conforman una dupla que le da juego interno al equipo, cuando se juntan a "dialogar" como en el segundo tiempo se ven los mejores momentos de juego. Y Vázquez que demuestra como se perdió el tiempo jugando sin un centrodelantero. Es jóven aún y hay que bancarlo, pero Boca vuelve a tener una referencia de área y además saliendo hacia la derecha demostró que no es ningún negado con los pies. 

Así que Rossi-Izquierdoz-Rojo-Sandez-Ramirez-Molinas-Vázquez, 7 jugadores sobre los que armar una base de equipo. No es poca cosa en tres partidos lograr esto. Si además vemos que el lateral derecho por algunos partidos será de Weingadt (Advíncula salió lesionado y además debía irse con la selección peruana), quedan solo tres puestos a cubrir. El volante central; ayer nuevamente se definió por Rolón, que no desentonó, suponemos que por el equilibrio defensivo, pero el ingreso de Varela le volvió a dar otro vuelo al juego ofensivo, el interno derecho; ayer jugó Almendra, no lució y luego ingresó el Pulpo González. Entre estos dos y Medina está la competencia y por último el extremo, ayer fue Pavón y no estuvo fino, luego entró Briasco y fue más punzante, además espera Zeballos y ojo si el pibe logra asentarse.

Con paciencia y trabajo se irá conformando algo que nos dará muchas satisfacciones. Lamentablemente el margen de error en este torneo es mínimo por las condiciones en que asumió Battaglia (bien hundidos en el fondo de la tabla), pero si se logra encadenar una racha de triunfos, cuidado con Boca. Además no olvidar que estamos en cuartos de final de la Copa Argentina y ahí hay que apuntar todos los cañones, pues se está a solo 3 partidos de ganarla y clasificar a la Libertadores 2022