Prueba fallida

 Había que rotar y se rotó fuerte. Pero lo que se vio debe dejar una enseñanza a futuro. Boca perdió por primera vez contra Patronato, en un partido chato, donde el desempeño del "Boca muletto" dejó mucho que desear. 

No se le puede caer a los pibes, para nada. Debutaron Giampaoli y Ezequiel Fernández. El primero, marcador central no desentonó, el segundo igual, es más fue reemplazado por Pulpo González y el desempeño del equipo empeoró. También jugaron alguno minutos Sandez y Valentini, este último debutando en reemplazo de Rojo. Más bien se podría caer en un pibe, ya no tan pibe, como Maroni que volvió a desperdiciar otra oportunidad de lucirse y a otro, que si bien es pibe, Obando, ya suma muchos minutos como titular sin lograr tener actuaciones destacadas con continuidad. Del panorama juvenil, lo mejor fue por el lado de Zeballos, que demasiado individualista fue el que mejor rindió. Todos esperamos que alguna vez Russo le permita jugar por izquierda, el lugar donde lo hace habitualmente en las inferiores, jugando con perfil cambiado, y no encerrado por la derecha donde le cuesta más ir por afuera. Inentendible que en tren de pruebas y por mantenerle un lugar a Obando no lo haga.

De los "veteranos", un buen partido de García, que no tuvo nada que ver en el gol y sacó varias pelotas, Capaldo desapercibido al igual que Fabra y Soldano, como lamentablemente es habitual, mucha entrega, mucho correr y demasiado poco aporte al juego. Aunque, hay que reconocer, que con los centros que tiraron ayer ni el mejor Palermo podría haber hecho mucho más.

Es una derrota que se lamenta porque hoy se podría perder el segundo lugar (si gana Talleres a Lanús), y de esa forma los cuartos de final se jugarían en cancha ajena. Pero sobre todo es una derrota que nos debe dejar una enseñanza fundamental: Boca no tiene "dos equipos" ni por cerca. A lo sumo puede generar una rotación acotada si es que quiere dar algún descanso y competir con chances. Esto pensando en que se vienen tres semanas (si seguimos avanzando en la competencia local) en que habrá partidos eliminatorios el fin de semana y la definición del grupo de la Libertadores entre semana. Obviamente que si todo sale medianamente bien y como mínimo clasificamos en la Libertadores, este junio, con libro de pases abiertos habrá que dar el salto de calidad en la conformación del plantel de una vez por todas, si es que no queremos sufrir otra frustación.