Pocos, casi nadie, hace 8 días podía pensar que luego del parate por la pandemia Boca se volvería al cabo de dos partidos de visitante con los 6 puntos para casa.
Pero así ha sido. Luego del 2-0 de la semana pasada en Asunción, ahora se suma el 1-0 en Medellín, por lo que se ha vuelto a ganar en Colombia luego de 16 años. No se lo lograba eesde el 1-0 al Deportivo Cali en 2004. Pasaron 7 partidos, que fueron 5 empates y 2 derrotas.
Vimos un Boca utilitario, ordenado, que se paró bien en el propio campo a punto tal de no sufrir una situación clara de gol en contra, que administró el ritmo (muy cansino durante largos pasajes). En los momentos en que Boca forzaba un poco el ritmo quedaba clara la superioridad tanto individual como colectiva y solo la falta de eficacia en al menos 4 oportunidades posibilitaban que el partido se deslizara hacia un empate en 0. Sólo a pocos mjnutos del final un horror defensivo del local dejó a Capaldo (ingresó por Campuzzano) en óptima situación psra definir, pero lo hizo mal y Salvio que venía acompañando selló el resultado.
Con Carlitos como abanderado y figura, Zambrano e Izquierdoz sólidos, el equilibrio de Campuzzano y la racha goleadora del Toto fueron los puntos destacados de un equipo que no brilló pero que entiende como se juega de visitante en la Copa.
Ahora restan dos partidos en la Bombonera. Con sacar un punto el martes ya esyará la clasificación a octavos, un triunfo casi que garantiza ganar el grupo. Boca volvió con todo del parate. El equipo rinde y las ilusiones de todos están intactas.
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