Es bastante difícil adentrarse en una mente humana. Sobre todo si uno no es profesional en la materia y no se tiene contacto con el "escrutado". Hay que partir de una premisa, el estudiado en cuestión no se autoboicotea, al menos conscientemente, y además tiene un equipo técnico que junto a él cranea la previa de los partidos, aunque desconocemos el grado de injerencia que tienen en la decisión final. Ahora bien, con todas estas salvedades, surge la primera pregunta: ¿Qué llevó a Almirón en medio de una rotación más que justificada a armar el equipo que armó?
García, Blondel, Valdez, RONCAGLIA, Sarachi; PULPO GONZALEZ; Campuzano, RAMIREZ; Zeballos, Benedetto, Janson.
En mayúsculas los nombres incomprensibles, los que hicieron que el equipo se arrastrara todo el primer tiempo, teniendo mucho la pelota pero sin generar ningún riesgo a un adversario que agrupado atrás esperó su oportunidad de contragolpe, la tuvo, la aprovecho y finalmente se llevó, después de 41 años, el triunfo por 1-0.
¿Qué hace que Roncaglia, con 38 años, juegue en lugar de darle rodaje a un pibe como Anselmino que se lució en los pocos minutos que jugó?. Y conste que el dato de la edad no es determinante por sí mismo si no que el nivel de juego viene siendo pobre desde hace rato.
¿Pulpo y Ramírez en lugar de Taborda y Bullaude que aún no debutó? Incomprensible a todas luces.
En el arranque del segundo tiempo salieron Campuzano y el Pulpo para que ingresaran Rolón y Taborda, promediando la etapa salió el Pulpo para que ingresara Merentiel (también Briasco, que luego se lesionó, entró por Janson). Y con todos esos cambios, Boca mejoró, dominó, creó situaciones para empatarlo, no tuvo puntería, a tal punto que en un regalo inesperado de un defensor local, tuvimos un penal a minutos del final que Pipa se encargó de entregárselo al arquero. Así, con ese nivel de irresponsabilidad es muy difícil salvar aunque sea un punto. Quedaron unos minutos para que Valentini, que reemplazó a Briasco que solo estuvo unos minutos en cancha, saliera con la boca sangrando por un manotazo de un defensor y el árbitro y el VAR ignoraron olímpicamente el penal que debieron cobrar. Lógico, hacía casi un año que no nos daban uno, mirá si nos iban a dar 2 en pocos minutos.
No se puede hacer un drama por todo, y esta derrota no debe generarlo. Todos estamos con la cabeza en el miércoles y en pasar a semifinales de la Copa. Lo único que podemos pedir desde acá es que la mente de Almirón se despeje de ideas raras y que arme un equipo lógico, desde el esquema y desde los integrantes de ese esquema. No pedimos mucho, solo que el inodoro esté en el baño y la heladera en la cocina. Ni más ni menos, solo con eso tendremos permiso para soñar.