Boca jugará la final de la Copa Maradona el domingo 17 de enero en San Juan. Mientras todos pensamos en llegar a la final de la Libertadores, el equipo se metió en la final local.
Tantas cuentas que se sacaron en la previa y con un empate (2-2) alcanzó, porque los que compartían la punta y muchos daban como favoritos cayeron 0-2 ante el eliminado Independiente.
Fue, como se preveía, un partido complicado. Costó un cuarto de hora hacer pie frente a un Argentinos que salió con todo a presionar en todos lados y rápidamente se puso en ventaja. Pero a partir que Cardona empezó a encontrar espacios y manejar los tiempos, más el muy buen partido de Zárate (bienvenido de vuelta Mauro), llegó al empate y sobre el final de la etapa Wanchope desperdició un penal que pudo dar la ventaja en ese primer período.
En el segundo tiempo, de entrada Wanchope se reivindica aprovechando un grueso error de la defensa rival y pone la ventaja merecida a esa altura. Con el resultado puesto del otro partido, el finalista salía de este enfrentamiento. Los minutos se consumían sin ningún riesgo y mientras Boca desperdiciaba algunas chances de liquidar. Ya se habían hecho 4 cambios, y cuando solo restaban 3 minutos, en un rebote aislado el local encuentra el empate y queda a un gol de ser finalista. La tensión y el descontrol de los últimos 8 minutos (5 de recupero) fueron tremendos. El local que fue a la carga con lo que tenía, Boca que no tenía ni a Cardona ni a Mauro para tenerla, se refugió dispuesto a rechazar los mil y un centro que tirarían. Y así fue. Sin correr mayores rirsgos se consumieron los minutos y se selló el pase a la final de la Copa Diego Maradona.
Si 2020 fue un año donde el Boca de Russo cumplió todos los objetivos posibles, el comienzo de 2021 sigue esa camino. Ojalá el miércoles podamos seguir diciendo esto
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