Ya estamos otra vez en la antesala de una definición. Parece ser una sana costumbre desde hace 10 años. Disfrutalo amigo bostero. No siempre fue así. Si ya peinás alguna canita y en algún lugar de tu cabeza comienza a ralear el cabello, seguro te acordás de la década del 80 y de gran parte de la del 90. Te acordás de aquello de "ventilador" porque solo andábamos en el verano, de los campeonatos perdidos al final y sobre todo de los que jugábamos sin chances desde muchas fechas antes. Fueron 17 años, desde el campeón 81 hasta la llegada del Gran Virrey. Diecisiete años de recorrido por un desierto futbolístico. Con ocasionales oasis, eso si. El ciclo de Aimar con la Supercopa ´89 y la Recopa ´90. El primer paso del Maestro Tabárez con el Apertura ´92 (y también el Clausura ´91, aunque la derrota por penales con Newell´s opacó ese torneo jugado brillantemente y ganado invicto). Después Habberger, el segundo paso de Menotti, el segundo también de Marzolini, con el increíble Apertura ´95 perdido todavía no sabemos como, Bilardo, Veira, hasta la llegada de Carlos Bianchi.
Y eso ya es historia archiconocida. Torneos locales, Copas Internacionales, reconocimiento y prestigio para el Club, los jugadores, los distintos técnicos y orgullo a reventar para todos los hinchas. Y no solo por lo que se ganó o por los rivales a los que se enfrentó. Sobre todo por haber sido continuamente protagonistas en estos 10 años. No se ganó todo, cosa que sería imposible, pero se luchó hasta el final con posibilidades en casi todos los torneos.
Y llego al final del post solo para darme cuenta que toda esta perorata algo nostalgiosa es solamente para decir ¡¡¡Vamos Boquita, Corazón y pases cortos!!!..... ya se acerca Nochebuena.....
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