1/12/21

¿Qué te pasa Sebastián?

 Otra decepcionante actuación de Boca que no pudo pasar del empate en 0 ante uno de los peores Newell´s de la historia del club rosarino. Un partido que ha sido un hito más en la involución que tiene el equipo. Y lamentablemente hay que hacer foco en el técnico. 

Es realmente un caso de estudio el de Battaglia. Arrancó su proceso hace 15 fechas con las mejores perspectivas y sin embargo con el correr de las fechas vamos viendo planteos y decisiones que sorprenden primero y decepcionan después. Para no irnos muy atrás, luego de vencer a Aldosivi con claridad y, mini receso mediante volver a hacer lo mismo frente a Sarmiento, cuando parecía haber encontrado el esquema y los intérpretes, se ha dedicado en las dos fechas siguientes a dinamitar todo. Primero la incomprensible rotación ante Independiente, para terminar poniendo a los rotados a las apuradas en el segundo tiempo y perdiendo el partido. El partido de anoche se debió jugar el domingo y se suspendió por lluvia, sobre la hora y con la planilla firmada. Se descontaba que esos serían los que saldrían anoche. Pues no. A último momento quedaron afuera Zambrano (López), Cardona (Salvio) y Villa (Zeballos). Nadie entendía nada. Luego del partido Battaglia declara que los tres tuvieron una "intoxicación". Sin embargo dos de esos tres, Cardona y Villa entraron en el segundo tiempo, así que la "intoxicación" o fue demasiado leve, o no mereció mayor sanción (no sabemos que clase de "intoxicación" fue, aunque hay varios rumores al respecto), lo cierto es que otra vez se varió el esquema sobre la marcha y no dio resultado.

¿Cuantas veces habrá que probar el 4-3-3 para entender que no tenemos intérpretes para sostenerlo? Y encima anoche, Almendra y Ramírez, los que deben conectar con los de adelante tuvieron una noche flojísima. ¿Por qué Salvio, evidentemente falto de fútbol y con necesidad imperiosa de una pretemporada y no Molinas para reemplazar a Cardona y no toca el esquema? Es toda del dt la respuesta.

Lo cierto es que luego de unos diez minutos prometedores, Boca entró en la abulia total y fue incapaz de llegarle a un Newell´s cuyo único argumento fue amontonar gente en su campo y esperar un contragolpe milagroso, y casi se le da sobre el final de la etapa y solo lo evitó una estupenda acción de Rossi. Acción que repitió por duplicado al comienzo del complemento en un par de llegadas del visitante.

Que debían entrar Cardona y Villa se caía de maduro. Pero no se aprovechó el entretiempo, sino que se gastaron dos ventanas  de cambios a los 15 y 20 minutos para que ingresen Villa y Cardona en ese orden. La presencia de Edwin dió otro volumen de juego y a falta de 10 minutos el ingreso de Pavón por Almendra permitió el empujón final en el que Boca mereció ganar el partido. Un gol anulado por esos orsays milimétricos que si son en contra de Boca no se discuten y se repiten poco, dos tiros en el palo y una mala ejecución de Ramírez con el arco solo. Además de jugar mal, no se liga nada. Hay que decir todo.

Y así llegamos a las dos fechas finales (la final de la Copa Argentina en el medio) con la clasificación a la Libertadores en el aire, y por ahora afuera. Es una lástima porque hay material de sobra para no estar sufriendo así, pero lamentablemente no se ha definido ni un estructura ni un esquema básico, pese a que se ha visto por donde se debe ir. Esperemos que todos recuperen la sensatez en esta dos semanas finales. El futuro de varios depende de ello. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario