Y Sebas tuvo razón

 Rotó fuerte (7 cambios), dio rodaje, hizo debutar y Boca ganó, jugó bien por largos pasajes y se volvió vencedor desde San Miguel de Tucumán luego de 45 años.

De los titulares que jugaron el pasado martes solo Rossi, Izquierdoz, Campuzano y Ramírez saltaron en el 11 titular. Pese a lo que muchos pensamos, que eran demasiados cambios, que no se justificaban desde lo físico porque se venía de un parate de 10 días anteriores al último partido, que así el equipo nunca termina de asentarse y formarse, Battaglia tuvo razón. Guardó jugadores, dio rodaje, hizo debutar a Montes y puede irse contento porque asoma más que un equipo, un plantel.

Buen primer tiempo de Boca, con un 2-0 parcial y el dominio total del partido. Un segundo tiempo que arranca exactamente igual, pero, como el fútbol es impredecible, en la jugada posterior a una mano-penal ignorada por el árbitro (el mismo que ignoró al menos tres claras rojas para los tucumanos que pegaron a lo loco y recién mostró una a los 50 minutos del segundo tiempo), deriva en un gol en contra de Licha López, que había marcado el primer gol y venía siendo figura. A partir de ese momento, acicateados por el gol y la permisividad arbitral ya citada los locales se lanzaron a un ataque de mucha gente y más centros, nunca estuvo cerca de empatar pero el resultado siempre fue incierto, porque encima, Boca no pudo por malas decisiones o por el arquero liquidar un partido en el que hubo al menos tres goles de diferencia por el rendimiento de ambos. Fue finalmente 2-1 y los tres puntos se sumaron y el invicto de la era Battaglia continúa.

Boca tiene un plantel. Rossi volvió a mostrar sobriedad y seguridad. Advíncula jugó tal vez su mejor partido. López volvió a la titularidad y rindió como si lo fuera habitualmente. Cali y Rojo jugaron un tiempo cada uno como segundo central y ambos rindieron. Fabra (que importante es la competencia) rindió hasta defensivamente. Campuzano se está ganando la titularidad volviendo al nivel que tuvo alguna vez, Ramírez es rendidor y siempre ha jugado bien, Montes, gran debut, con despliegue y llegada, marcó el segundo gol en una gran jugada colectiva, es tal vez, "el más 8" que tenemos. Obvio que tendrá que ir de a poco. Cardona volvió y jugó bien, con intermitencias pero con un despliegue poco habitual. Otro al que el acicateo de perder la titularidad le vino bien. Arriba Pavón fue desequilibrante por ambas bandas y Orsini tuvo un buen desempeño más allá que se le negó el gol por poco mostró buenas aptitudes para ganarse más minutos. 

En el segundo tiempo fueron entrando el ya citado Rojo, Varela por Cardona para reforzar el medio cuando se venía Atlético, alternó buenas y malas, es evidente (y hasta lógica por su juventud) su baja de nivel. Luego Molinas por Ramírez y Vázquez por Orsini. El delantero pesó poco y nada y Molinas, que entró para retener la pelota, lo hizo con gran aptitud, por momentos hizo acordar al "torero" Román, y la patada que se comió al final mostró la exasperación que le produjo a los rivales. Al final, y para enfriar el partido, entró Briasco por Pavón.

Un resultado doblemente positivo, por el triunfo y por las sensaciones que quedan de cara al futuro. Ahora tocará la Copa Argentina y la posibilidad de pasar a la semifinal. Patronato será el escollo, hace poco nos demostró que no será un rival sencillo, pero eso, será tema dentro de un par de días. Ahora, a disfrutar.