5/9/21

....que 15 años no es nada...

 Y Boca volvió a ganar en Rosario. Y el Boca de Battaglia sigue invicto, lo dio vuelta y jugó su mejor partido hasta ahora. Nos sobran los motivos para ser optimistas.

Y no solo por lo que se vio en la cancha, sino que lo que vino desde el banco tuvo mucho que ver. Cambios tácticos adecuados a poco de iniciado el partido y con el marcador adverso, cambios de piezas a poco de comenzado el segundo tiempo y atinadas declaraciones reconociendo errores en el armado inicial. Todo un combo como para pensar que el ciclo de Sebastián pinta para darnos muchas satisfacciones.

El partido empezó complicado, con un Central agresivo que atacó sin pausa, pero que en un par de respiros de Boca mostró que no era seguro atrás. Rossi sacó un par, no pudo evitar el gol a los 10 minutos en los 10 minutos siguientes volvió a salvar su arco. Justamente en esos momentos (20 minutos) llegó el cambio posicional de Ramírez que había arrancado como enganche y no hacía pie, para pasar a jugar como interno izquierdo y adelantar a Almendra. A partir de ese momento el andar ofensivo empezó a tener otra prestancia y las subidas de los laterales comenzaron a pesar. Y hay que detenerse ahí. Si algo, entre otras cosas, distingue a este ciclo del anterior es la voracidad para buscar el gol, y en esto cumplen un papel importante los laterales. Sandez, que con Russo solo mostraba disciplina defensiva, ahora juega suelto y anoche fue la gran figura de la cancha. Se cansó de desbordar formando un más que interesante triángulo con Ramírez y Briasco, pero además sus centros son atinados y precisos, no solo en el que conectó el empate parcial Vázquez (había que jugar con un 9, no era nada misterioso), y además otro par que por poco no fueron goles de Weingadt, si el lateral derecho metiendo diagonal al área y llegando vacío por el otro lado. Otro signo distintivo de este ciclo. Y con la actuación de ayer, el Chelo le sacó una buena distancia a Advíncula en esa pelea por el puesto.

Y si el cambio posicional del primer tiempo permitió emparejar el juego, las entradas de Molinas por Medina y de Varela por Campuzano a poco de iniciarse la segunda etapa volcaron definitivamente el desarrollo a favor de Boca. Aaron de enganche, Varela como único volante central, Almendra por derecha, Ramírez por izquierda, los laterales que seguían subiendo, Pavón que reemplazó a Briasco, por momentos Boca lo desbordó física y futbolísticamente a Central, que solo atinó a un par de contraataques peligrosos y que sostuvo el resultado hasta el último gracias a la tarea de su arquero. Y de tanto ir el cántaro a la fuente, se rompió de la manera más tonta, un buscapie de Pavón entrando hasta el fondo por derecha y un defensor que quiere despejar y se la mete en su propio arco. Plin caja, buen partido, buen rendimiento y tres puntos.

¿Esto es todo lo que veremos de Boca? No, la película nos muestra una mejora partido a partido, este tiene que ser el piso. Está la idea, está la voluntad y el compromiso para llevarla adelante, aún falta decidirse por algunos intérpretes, aún faltan mecanizaciones, aún falta ver las respuestas ante equipos que mantengan la presión por más tiempo que Central o que se abroquelen en su propio campo. Es largo el camino, pero las herramientas están y están a la vista. Se viene un mini parate de 9 días, ideales que para que se siga trabajando en todo esto. 

Se vienen buenos tiempos. Hay lindas sensaciones....las malas parecen haber quedado atrás, las buenas ya van venir....

No hay comentarios:

Publicar un comentario