Día de arqueros

Fue empate sin goles el debut de Boca en la Superliga. Y fue ese el resultado por el partido que tuvieron ambos arqueros. Andrada en la primer media hora sacó tres pelotas de gol seguro. Silva, sobre todo en el segundo tiempo, fue un muro infranqueable en las muchas situaciones de gol que creó Boca.
No jugó bien Boca. Sufrió durante media hora en la que el Globo tiró presión alta sobre la salida, y cuando no lograba su objetivo se paraba corto en su campo dispuesto a contraatacar con rapidez y mucha gente. Ante este panorama los locales estuvieron imprecisos en la salida y le costó superar el muro visitante en su propio campo. Bebelo alternando unas muy buenas con varias muy malas, Villa impreciso (y fastidioso), Campuzano de menor a mayor y Almendra perdido, generaban poco para Carlitos que participó mucho y con acierto y para Hurtado de auspicioso debut, con buenos movimientos y participación pero que falló en la definición.
En el segundo tiempo, un poco por mejoría propia y otro por cansancio del rival, fue todo de Boca. Porque Huracán solo atino a pararse 20 metros más atrás y los contragolpes ya no salieron, y entonces llegó el momento de su arquero que tapó todo, a Hurtado dos veces, a Carlitos, a Mauro que entró al igual que Salvio en el cuarto de hora inicial del segundo tiempo. Auspicioso lo de Toto, demostró clase y que va a hacer surcos por la banda derecha. Lástima que sus compañeros no estuvieron finos para la última puntada. 
Sin Mc Allister en el banco, no se entendió la salida de Bebelo para que entrara Wanchope. Ya había salido Almendra para que ingresara Mauro (Salvio fue por Villa), y entonces Boca jugó con 5 delanteros, pero no hubo quien aportara claridad para abastecerlos. Y no es que Bebelo estuviera en su gran noche, pero al salir dejó vacante ese casillero tan necesario.
Tampoco es cuestión de ser demasiados severos en un partido de inicio de torneo y con un equipo "de emergencia". Ahora todos los cañones y la atención están centrados en el miércoles y en asegurar el pase a cuartos de final de la Libertadores. Si se lográ habrá más de un mes por delante para ocuparse de la Superliga sin interferencias.