La Libertadores 2015 ya es un recuerdo para Boca, aunque las consecuencias de lo sucedido amagan con repercutir durante mucho tiempo. Por un lado las sanciones que están al caer y que seguramente serán más severas que las que se les aplicarían a varios en circunstancias parecidas. Aunque suponemos que no llegarán al extremo de prohibir la participación en copas por uno o dos años. Sería un despropósito. Por otro lado las consecuencias políticas en un año electoral. De hecho ya se menciona que Angelici no se presentará a la reelección e incluso se rumorea el adelantamiento de las elecciones previstas para diciembre. Y por último las consecuencias deportivas de acá en adelante.
Boca conformó un gran plantel, con la obsesión de ganar su séptima Libertadores y pelear el resto de los frentes, pero ya eliminados en octavos de final y con solamente el frente local para jugar (el torneo y la Copa Argentina), se antoja demasiado caro mantener semejante estructura, que encima se pensaba ampliar con la vuelta de Tévez en julio. Ya podemos ir postergando ese sueño para el próximo año cuando venza su contrato con la Juventus.
La primer baja al pararse el torneo por la Copa América será Osvaldo. Vino a préstamo hasta esa fecha con una ampliación hasta agosto si se llegaba a semi y final de la Copa. Pero esto no ocurrió y suena a descabellado pensar en una compra. No solo por el monto de la misma, también por el monto de su contrato. También se rumorea el posible pase de Calleri en cifras millonarias. El Palermo, que acaba de vender a Dybala sería el interesado. En ese caso Boca se quedaría sin los dos centrodelanteros, oportunidad para Vadalá y quizás el retorno de Gigliotti, a préstamo en China.
Otro de los que se rumorea que puede emigrar es Orión. Tiene contrato hasta 2017, pero se decía hace unos días que esgrimiría problemas personales para irse del país, además su desafortunado saludo a la barra luego del escándalo puede acelerar los tiempos. Sara ahí tendrá su gran oportunidad.
Otro contrato que vence en junio es el de Burdisso. Que ha ganado terreno e inesperadamente fue titular el jueves. Habrá que ver, pero Boca ahí tiene sobrepoblación de jugadores (Cata, Torsiglieri, Rolín, Magallán y Komar).
¿Gago seguirá después de la Copa América?. Por ahora nada se sabe en ese sentido, pero no habría que descartar su salida. En el mismo sentido se puede teorizar sobre Lodeiro. Boca adquirió la mitad de su pase y la otra mitad es de un grupo empresario. En caso de una brillante Copa América de Uruguay habrá que ver si llegado el caso de ofertas europeas por él si se podrá retenerlo.
El que estará observado con lupa es el Vasco Arruabarrena. Boca está puntero e invicto en el torneo. No es poca cosa. Pero ahora le tocará levantar anímicamente a un plantel tocado por todos estos sucesos y administrar una abundancia de recursos humanos poco común en el fútbol argentino. Tener a todos “contentos” es relativamente fácil durante una doble competencia, donde rotaciones mediante, nadie es suplente y todos se sienten titulares. Ahora tendrá que definir un equipo casi “de memoria”, pues se jugará solamente los domingos (eventualmente entre semana, pero muy separadas en el tiempo, por la Copa Argentina), y ahí habrá que tener muñeca para administrar egos y celos y seguir haciendo sentir importantes a todos. Menudo trabajo.
Llego el momento de rumiar la bronca y lamer las heridas. Lamentablemente creo que nunca sabremos y entenderemos realmente que fue lo que pasó el jueves. Miras y miras el video sobre los sucesos y las dudas se agigantan. ¿Por qué si desde el primer momento 2 jugadores y un allegado señalan al agresor, luego se desdicen en boca del dt y señalan a la tribuna?, ¿por qué si el gas fue tirado en la manga, en vez de escapar en tropel vuelven a entrar en ella?, si reconocen al agresor cuando ellos estaban saliendo del túnel, quiere decir que el mismo estaba dentro de la manga. ¿Cuanta gente tiene ese acceso?, no debería ser muy difícil identificarlo y detenerlo. Habrá que ver si hay voluntad de hacerlo.
Se vienen meses difíciles y duros en Boca. El proceso electoral en el club, que coincide con el proceso electoral nacional, solo augura meses turbulentos. Boca es una presa deseada por todos los grupos políticos y eso no augura momentos fáciles aún en la parte deportiva.
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