Arranque con triunfo

 Boca arrancó ganando por la mínima (Oscar Romero) en la primer fecha del Torneo de la Liga, ante un rival previsiblemente duro y complicado. Fue de menor a mayor y terminó justificando la victoria por lo realizado en el segundo tiempo, sobre todo a partir del gol que sería definitivo y cuando Ibarra se decidió a realizar los retoques que el partido pedía a gritos.

Pongamos las cosas en contexto. Ahora es muy fácil salir a decir (y muchos lo harán), "este es el mismo Boca del pasado torneo", "no juega a nada", "lo salvan las individualidades", "no hay trabajo". Pero hay que tomar varias cosas en cuenta. Es el recién el cuarto partido luego de un parate de 3 meses. El segundo oficial y el de inicio del torneo. Obviamente no se está fino futbolísticamente. Hay mucho para corregir y se advierten también muchos puntos positivos.

Físicamente el equipo parece revitalizado. La mejor prueba es Orsini, que si ser una maravilla de juego luce mucho mejor que hasta hace poco. Corrió, presionó, molestó, pivoteo y de un pase suyo de cabeza nace el desborde de Villa que Romero transforma en gol.

Varios jugadores estuvieron aceptablemente bien. Chiquito Romero respondió bien en la única que tuvo mano a mano y cometió un error grosero en una salida. Pero esta es su característica, es un arquero "rebotero" y cuando alguno queda corto es todo un problema. Muy recuperado Advíncula que jugó un buen partido, tanto en ataque como en defensa. Figal en gran nivel y el debut de Valdez más que auspicioso. Sandez todo corazón, alternó buenas y malas, pero su despliegue es conmovedor. 

Lo más flojo del equipo estuvo en el  medio. Ni Pol ni Ramírez jugaron bien y el equipo vaya si lo sintió. Además sus flojas actuaciones arrastraron a Varela que sobre todo en el primer tiempo lució inseguro y errático. Romero, inicialmente como extremo derecho, pierde mucho protagonismo ahí, se vió obligado a volantear y de hecho fue el mejor del equipo haciéndolo. Demoró demasiado Ibarra en solucionar esto. Recién sobre los 25 minutos del segundo tiempo (y a minutos de estar en ventaja) hizo ingresar a Equi Fernández por Ramírez y a Langoni por Pol, pasando Romero a la posición de volante izquierdo, hasta que agotado fue reemplazado por Medina. Y desde el primer momento de esos cambios la dinámica y la fluidez del equipo fue otra. Queda por citar a Villa que está lejos de su mejor nivel, alternó algunas buenas (decisivo en el gol) con varias malas y sobre todo malas decisiones.

Paso a paso y con tranquilidad. Se viene una semana para trabajar el ritmo y el timming y sobre todo para que Ibarra tome nota de los puntos flacos y sus soluciones. Es de esperar que Equi juegue de entrada junto con Varela. A su lado en un 4-3-3 o compartiendo el medio en un 4-2-3-1 o un 4-3-3. Idealmente con Romero del otro lado si se opta por este último sistema y con Langoni como extremo.

Pero todas estas serán decisiones que tome el dt observando el día a día, cosa que el común de los hinchas y opinadores desconocemos.