Pusieron el freno de mano. ¿Dan marcha atrás?

   Pésimo había caído en la abrumadora mayoría de los hinchas el mamarracho de campeonato que intentaban pergeñar el gobierno y Grondona, con la exclusiva finalidad de asegurarse una mayor cantidad de dinero por las transmisiones televisivas, mayor impacto para la publicidad política y el retorno de varios equipos “de primera”, aunque el sincericidio del vocero de la AFA, Chequis Bialo, mostró claramente que solo importaba que volviera “el que no podía descender”.

   Las encuestas y la manera que los medios trataron el tema fueron lapidarios. El gobierno dio marcha atrás y obligó a la AFA a desligarlo. Ayer en un par de notas a dos radios, Grondona y Meizner hicieron esto e intentaron decir que la cosa sigue, pero…..

   Oficialmente el tema del nuevo torneo se tratará “antes de fin de año”, noviembre o tal vez diciembre, “el proyecto sigue adelante”, pero “si la Asamblea lo rechaza, todo queda igual” ¿apertura de paraguas?.

   Mientras tanto, la AFA rompe el contrato con Trisa, en la que el grupo Clarín es parte y tenía los derechos televisivos del Nacional B hasta 2014 y le se los entrega a Fútbol Para Todos como ya hizo con los de Primera División, con el consiguiente aumento de fondos para repartir.

   Entonces, si se suman todas las piezas: el gobierno tendrá en su pantalla (con toda la publicidad a la que acostumbra) a los “grandes” del Nacional B, además de los de Primera División. Grondona seguramente abrochará su requeterecontrareelección el 18 de Octubre en Asamblea de AFA. Las elecciones presidenciales son el 23 de Octubre y la eventual segunda vuelta a principios de Noviembre, por lo tanto la eventual aprobación o rechazo, nada sumará a la parte política. El malestar popular es muy grande y varios clubes ya empiezan a hacer manifiesta su posición en contrario (los dirigentes son obedientes pero en el fondo le temen a sus asociados). Todo esto da para elucubrar que para no sufrir el costo de un rechazo liso y llano, se va a ir “pateando” el tratamiento para más adelante, con la excusa de ir puliéndolo y de a poco cajonearlo sin más.

   Veremos con el correr de los días y meses si esto es así o ha sido solo una expresión de deseos. Lo cierto es que Grondona y gobierno han sufrido una derrota política no prevista. Grondona está en su momento de mayor debilidad en 32 años. Después de perder esta batalla, ¿se animará a seguir la guerra?