6/11/22

Se baja el telón del 2022



Último partido de la temporada. Un trofeo en juego. Y como manda la historia, Boca será protagonista. Un título oficial espera. Un título raro, como es raro el fútbol argentino. Se denomina pomposamente "Trofeo de Campeones". Pero solo uno es campeón. El otro solo ha ganado un duelo entre subcampeones y por eso se ganó el derecho a jugarlo. Sería más honesto poner el Trofeo "Juan Pindonga" y no la mención de campeones, pero no podemos pretender ingenio y honestidad en nuestro fútbol, con nuestra dirigencia. Sería un oximoron.

El tema es que nos volveremos a ver la caras con Racing. Y para ellos será una especie de revancha a su propio fracaso en obtener el Torneo de la Liga, cuando tuvo todo dado para hacerlo en la última fecha. También, seguramente lo tomarán como revancha de la Copa de la Liga, donde lo eliminamos en definición por penales y ellos inauguraron toda una retahila de "formas", "merecimientos", "ganar perdiendo" y "perder ganando", una sarta de pavadas para consolarse de una eliminación.

Racing viene de eliminar a Tigre el pasado miércoles, ganándole por 3-2 en tiempo suplementario luego de empatar en 2 goles el tiempo regular. Racing jugó un pésimo primer tiempo del que se fue derrotado 0-2, pero con Tigre en inferioridad numérica. En el segundo tiempo, junto con el retroceso del rival en el campo de juego, pudo revertir el resultado con más empuje que fútbol. En el alargue la diferencia de rendimiento físico hizo el resto.

Boca ha tenido descanso. Un descanso que se venía pidiendo a gritos. Luego de mucho tiempo se ha tenido tiempo de entrenar y ensayar durante más de una semana. Ibarra no ha confirmado el equipo, hay varias dudas del medio hacia adelante, pero algo es seguro, siempre, aún con varios cambios el esquema ha sido 4-3-3


Este es el equipo que plantó en el comienzo de la práctica del viernes. Podría jugar Langoni de entrada y salir Romero. O salir Romero y el paraguayo ir como volante izquierdo. Puede no estar de entrada Benedetto y en su lugar entrar Vázquez o Briasco. Incluso Briasco puede jugar como extremo derecho, pasando Villa a la izquierda y saliendo Romero o Ramírez.
Para Racing es casi un final del mundo. En su dimensión paralela este partido vendría a redimirlos de los fracasos varios que tuvieron en el año, un par de ellos justamente ante Boca. Por ende se supone que pondrán un plus de entrega en este partido. 
Para Boca tampoco es solo un partido que da un título oficial. También en el ánimo de los nuestros tiene que pesar todo el sobredimensionamiento que se hizo sobre el rival todo el año y el menosprecio con el que se valoró los títulos de Boca. Es una buena ocasión no solo para ganar si no para hacerlo con un nivel de juego mayor al que exhibimos habitualmente, aunque si ganamos de otra forma, se festejará igual.
También es importante este partido para Ibarra. Más allá que todo parece encaminado para la renovación de su contrato y la oficialización como dt de Boca, el sabor amargo que dejó la eliminación de la Copa Argentina puede ser altamente compensado si el equipo rinde satisfactoriamente. Esto dejaría a la vista que la merma física fue determinante para la rotación y el rendimiento no óptimo.
Final del año y una nueva final para Boca. Como toda final hay que jugarla con todo, peleando cada pelota, asfixiando al rival. Tenemos jugadores y calidad como para hacerlo. Solo falta concretarlo. Que sea. ¡Vamos Boca!

Historial en la competencia

Este será el primer enfrentamiento entre ambos equipos

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