Tropezón y caída en Lanús.

   Por lo general cuando se juega mal, en el fútbol se pierde. No siempre, ahí nomás tenemos el partido contra Rafaela para desmentir esta afirmación. Pero son excepciones, como quedó confirmado hace minutos.

   Boca jugó un pésimo partido, en todas sus líneas y en todas sus individualidades. Algunas tuvieron más responsabilidad que otras, pero ninguna pudo cambiar el curso de una historia que se fue desarrollando como Lanús podía soñar antes del partido.

   Desde la lesión casual de Pereyra, que posibilitó el ingreso de Valeri a poco de empezado el partido, y convirtiéndose en este en figura y autor del segundo gol. Pasando por otro grueso error de Ustari que en vez de tirar un simple puñetazo complica una pelota fácil y allana el camino al primer gol del partido, sobre los 30´del primer tiempo, cuando ninguno de los dos llevaba peligro al arco contrario. Y terminando en la forma desordenada en que Boca buscó el empate, con los que estaban en cancha o con los que fueron entrando en el segundo tiempo. Nunca se hizo pie en el medio de la cancha, siempre se avanzó con esfuerzo, chocando, raspando, para terminar buscando con centros una cabeza salvadora, sea la de Viatri o la de Silva, que nunca pudieron.

   Y ese ataque “a los ponchazos” contrastaba con un Lanús bien parado, que trababa, obstaculizaba y estaba afilado y rápido para la contra. Se caminó por la cornisa todo el segundo tiempo, varias veces Lanús perdonó, y por lo tanto el empate parecía posible, hasta que a poco del final, dejó de perdonar y Valeri, el que estaba en el banco y entró por un imprevisto, terminó con cualquier esperanza y selló el resultado de 2-0.

   Dura caída, por la forma en que se jugó, porque se escapó la punta del torneo, ahora somos terceros a 2 puntos de Newell´s y también los rosarinos y Vélez nos superan por un punto en la clasificación a la próxima Libertadores. Falta mucho, nada está perdido, pero es urgente una mejora en el nivel de juego y en el planteo de los partidos para levantar una situación adversa. Trabajo para la semana. Y duro.